¿Cómo se llama lo que hacen debajo de las casas?

Casas Bajo Tierra: Arquitectura Enterrada

25/02/2025

Valoración: 4.83 (7562 votos)

Cuando pensamos en una casa, nuestra mente suele visualizar una estructura que se eleva sobre el terreno, con cimientos sólidos que la anclan a la tierra. Sin embargo, existe una forma de construcción que invierte esta idea, aprovechando el propio suelo no solo como base, sino como parte fundamental de la estructura habitacional. Esta es la arquitectura subterránea, una práctica tan antigua como la humanidad que hoy resurge con fuerza por sus innumerables beneficios, especialmente en términos de sostenibilidad y confort térmico. Lejos de ser simples cuevas, estas construcciones son refugios ingeniosos que se integran y dialogan con el entorno natural de una manera única.

La arquitectura subterránea, también conocida como arquitectura enterrada, arquitectura excavada o incluso arquitectura troglodítica, representa un subgénero dentro del campo más amplio de la arquitectura solar bioclimática. Su principio fundamental reside en la utilización inteligente de los recursos naturales disponibles en el sitio de construcción. El más importante de estos recursos es, sin duda, el propio suelo consolidado. Al construir bajo tierra o semi-enterrado, se aprovecha una cualidad intrínseca del terreno: su extraordinaria capacidad de inercia térmica. Esta propiedad permite mitigar las fluctuaciones extremas de temperatura exterior, creando un ambiente interior mucho más estable y confortable a lo largo de todo el año.

¿Cómo se llama lo que hacen debajo de las casas?
La arquitectura subterránea también conocida por arquitectura enterrada, arquitectura excavada o arquitectura troglodítica es un subtipo de la arquitectura solar bioclimática que aprovecha una tecnología para reducir la incertidumbre ambiental para seres humanos en el subterráneo (bajo tierra) más cerca a la superficie ...

¿Qué es la Arquitectura Subterránea y Cómo Aprovecha el Entorno?

En esencia, la arquitectura subterránea busca crear espacios habitables protegidos por la masa de tierra circundante. A diferencia de las edificaciones tradicionales expuestas a las inclemencias del tiempo, una casa enterrada se beneficia de la temperatura relativamente constante que el suelo mantiene a cierta profundidad. Esta estabilidad térmica se convierte en un regulador natural del clima interior, reduciendo drásticamente la necesidad de sistemas activos de calefacción o aire acondicionado. Es una tecnología ancestral adaptada a las necesidades modernas, diseñada para ofrecer un refugio acogedor y duradero bajo la superficie.

El concepto central es la inercia térmica. La tierra tarda mucho más en calentarse o enfriarse que el aire. Cuando el exterior experimenta picos de calor en verano o fríos intensos en invierno, la temperatura del suelo a pocos metros de profundidad apenas varía, manteniéndose cerca de la temperatura media anual de la zona. La masa de tierra que rodea la vivienda actúa como un gigantesco aislante y acumulador de calor, liberándolo lentamente en invierno y absorbiéndolo en verano. Esto se traduce en temperaturas interiores que son cálidas cuando fuera hace frío y frescas cuando fuera hace calor.

Beneficios Clave de la Inercia Térmica

  • Confort Constante: Las temperaturas interiores se mantienen estables, cercanas a la media anual del aire exterior de la región. En zonas como España, esto puede significar temperaturas interiores rondando entre los 17 y 23 grados de forma natural.
  • Ahorro Energético: La menor necesidad de climatización activa reduce significativamente el consumo de energía y, por ende, las facturas.
  • Retraso Térmico: La inercia de las paredes y techos de tierra provoca que los picos y valles de temperatura interior se retrasen varios meses respecto a los del exterior. Cuando llega el frío más intenso del invierno, la tierra aún libera el calor acumulado en verano/otoño; cuando llega el calor del verano, la tierra aún mantiene el frescor del invierno/primavera.

La variación anual de la temperatura del terreno disminuye notablemente a medida que aumenta la profundidad. Esto es un factor crucial para el diseño de la arquitectura subterránea, ya que la estabilidad térmica deseada se logra a profundidades relativamente someras, dentro de la corteza terrestre, sin verse afectadas por el gradiente geotérmico profundo.

Profundidad bajo tierraVariación anual de temperatura
1 m± 5 grados
2 m± 3,3 grados
3 m± 2,2 grados
4 m± 1 grado
5 m± 1 grado

(Datos tomados en Burdeos, con temperatura media anual del aire exterior de 12,5 grados. La variación puede variar según la composición del suelo y la ubicación geográfica).

Además, con un ancho de paredes y techos superior a 0,3 metros, la variación diaria de la temperatura exterior es prácticamente imperceptible en el interior. Solo a profundidades mucho mayores la temperatura del terreno comienza a subir debido al calor del núcleo de la Tierra, pero esto no es relevante para las profundidades típicas de la arquitectura subterránea habitacional.

Requisitos y Consideraciones para la Construcción

Construir una vivienda bajo tierra no es tan simple como cavar un hoyo. Requiere cumplir con varios requisitos técnicos y geológicos para asegurar la estabilidad estructural, la impermeabilización y la habitabilidad. El factor más importante es el terreno. No todos los tipos de suelo son adecuados. Los terrenos más propicios consisten en materiales consolidados como arcilla, areniscas, margas, calizas, conglomerados o roca sedimentaria. Estos materiales ofrecen la cohesión y estabilidad necesarias para excavar y soportar la estructura sin riesgo de derrumbes.

La orientación de la vivienda es otro aspecto fundamental, especialmente en la arquitectura bioclimática. Dependiendo de la cultura y la ubicación geográfica, las fachadas con ventanas y puertas pueden orientarse para aprovechar o evitar la radiación solar. En el hemisferio Norte, la orientación hacia el Sur permite captar el calor del sol bajo en invierno y protegerse del sol alto de verano. En el hemisferio Sur, la orientación ideal es hacia el Norte. Sin embargo, en regiones con climas extremadamente cálidos, como en ciertas zonas de Oriente Medio, la orientación puede ser opuesta para minimizar la exposición solar directa.

La ventilación es crítica en cualquier espacio cerrado, y en las construcciones subterráneas adquiere una importancia particular para renovar el aire y controlar la humedad. Métodos como la chimenea solar (que utiliza el efecto chimenea para extraer aire caliente) o la creación de un patio interior excavado en el extremo opuesto a la entrada principal facilitan una buena circulación de aire cruzada, asegurando un ambiente interior fresco y saludable.

Humedad Interior: Un Aspecto Positivo

Contrario a lo que podría pensarse, la humedad relativa del aire interior en una construcción subterránea bien diseñada tiende a ser más alta que en casas convencionales con sistemas de calefacción o aire acondicionado. Ronda niveles cercanos al 50%, lo cual se considera más saludable para las vías respiratorias que los ambientes resecos creados por algunos sistemas de climatización. Esta mayor humedad se explica por la humedad naturalmente almacenada en la tierra circundante, que se difunde muy lentamente a través de las paredes y el techo en forma de vapor de agua, manteniendo un equilibrio higrométrico interior.

Usos Históricos y Actuales de la Arquitectura Subterránea

La práctica de construir bajo tierra no es una moda reciente; tiene profundas raíces históricas. A lo largo de los siglos y en diversas culturas, las estructuras excavadas han servido a una gran variedad de propósitos. Principalmente se usaban como vivienda, ofreciendo protección contra el clima extremo, los depredadores y, en ocasiones, incluso los conflictos. Pero sus usos iban más allá: servían como almacenes de grano, bodegas para mantener productos frescos a temperatura constante, sitios religiosos o incluso lugares funerarios, como las catacumbas.

Hoy en día, la arquitectura subterránea experimenta un renacimiento, impulsada por la búsqueda de soluciones constructivas más sostenibles y eficientes. Si bien la vivienda sigue siendo su uso principal, también se aplican sus principios a otras necesidades modernas. Se utilizan para construir garajes que se integran discretamente en el paisaje, habitaciones de ensayo o estudios de música por su excelente aislamiento acústico natural, o incluso lugares para fiestas y eventos, donde la estabilidad térmica y el aislamiento del ruido son ventajas clave.

Impacto Ambiental y Estética

Uno de los atractivos más significativos de este tipo de construcción es su muy bajo impacto medioambiental. Durante la fase de construcción, la principal actividad es la excavación, que altera menos el entorno que la construcción de una estructura elevada. Una vez construida, la vivienda se funde con el paisaje existente, a menudo siendo casi invisible desde la superficie, a excepción de las entradas o patios. Esto permite preservar la estética natural del lugar y minimizar la huella visual.

Además, el hecho de que rara vez se necesiten sistemas de calefacción o aire acondicionado convencionales reduce drásticamente el consumo de energía durante la vida útil de la edificación, disminuyendo las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas a la generación de energía. La tierra misma actúa como el principal material de construcción y aislamiento, reduciendo la necesidad de materiales manufacturados con alta energía incorporada.

Preguntas Frecuentes sobre las Casas Enterradas

Surgen muchas dudas al considerar vivir bajo tierra. Aquí abordamos algunas de las más comunes basadas en las características de esta arquitectura:

¿Son oscuras las casas subterráneas?

Aunque gran parte de la estructura está bajo tierra, el diseño inteligente incorpora entradas de luz natural a través de fachadas orientadas, patios interiores excavados, tragaluces o tubos solares, asegurando que los espacios interiores reciban suficiente iluminación durante el día.

¿Hay problemas de humedad o moho?

Una construcción subterránea bien diseñada y correctamente impermeabilizada no debería tener problemas de humedad excesiva o moho. La humedad que difunde la tierra es en forma de vapor y contribuye a una humedad relativa saludable (alrededor del 50%). Los problemas de humedad suelen deberse a una impermeabilización deficiente o a una ventilación inadecuada, aspectos críticos que deben cuidarse meticulosamente en el diseño y construcción.

¿Cómo se renueva el aire?

La ventilación se logra mediante sistemas pasivos como chimeneas solares o patios interiores, que permiten la circulación natural del aire. También se pueden incorporar sistemas de ventilación mecánica controlada si se desea un mayor control de la calidad del aire interior.

¿Son seguras ante terremotos o eventos climáticos extremos?

Al estar protegidas por la masa de tierra, las estructuras subterráneas suelen ser muy resistentes a vientos fuertes, huracanes e incluso sismos, ya que la tierra absorbe y disipa gran parte de la energía. La estabilidad estructural depende, por supuesto, de una correcta ingeniería y el tipo de suelo.

¿Se pueden construir en cualquier lugar?

No, el tipo de terreno es un factor limitante. Se requiere un suelo estable y cohesivo (arcilla, areniscas, calizas, etc.). Terrenos con alto nivel freático o suelos inestables no son adecuados sin complejas y costosas intervenciones.

En conclusión, la arquitectura subterránea ofrece una alternativa fascinante y altamente eficiente a la construcción convencional. Aprovechando la sabiduría ancestral y los principios de la bioclimática, permite crear hogares que son naturalmente confortables, energéticamente eficientes y respetuosos con el medio ambiente. Es una respuesta ingeniosa a la pregunta de qué se puede hacer 'debajo de las casas', demostrando que el subsuelo no es solo un soporte, sino un aliado poderoso para una vida sostenible y en armonía con la naturaleza.

Si quieres conocer otros artículos parecidos a Casas Bajo Tierra: Arquitectura Enterrada puedes visitar la categoría Arquitectura.

Subir