¿Qué impuestos se pagan por una casa nueva?

Construir Tu Casa Propia: ¿Es Posible?

23/05/2021

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La idea de tener una casa completamente a tu medida, diseñada según tus gustos y necesidades, es un sueño para muchos. En España, cada vez más personas optan por la autopromoción, es decir, construir su propia vivienda en lugar de comprar una ya hecha. Este camino, aunque tentador por el potencial ahorro y la personalización total, no está exento de dificultades y requiere una planificación meticulosa y una gran dosis de paciencia.

¿Es más barato construir o prefabricar?
La regla general es que la construcción prefabricada es más barata que las casas tradicionales en un promedio de entre un 10 % y un 25 % . ¿Por qué? La producción en masa de materiales en una cadena de montaje reduce los costos porque las fábricas compran los suministros al por mayor.

Si te estás planteando seriamente embarcarte en esta aventura, es crucial que conozcas todos los aspectos que implica el proceso. No es simplemente contratar a un constructor y esperar. Eres tú quien asume el rol de promotor, lo que conlleva responsabilidades, gestiones y la necesidad de estar al tanto de cada detalle. Pero, ¿es realmente factible y legal construir tu propia casa? La respuesta corta es sí, es legal, pero el proceso es complejo y exige cumplir con una serie de requisitos técnicos, legales y administrativos que detallaremos a continuación para que no desfallezcas en el intento.

¿Por Qué Considerar la Autopromoción? El Ahorro Potencial

Uno de los principales motores que impulsan a las personas a decidirse por la autopromoción es el factor económico. Diversos estudios coinciden en que construir tu propia casa puede representar un ahorro significativo en comparación con la compra de una vivienda de obra nueva o incluso de segunda mano. Se estima que este ahorro puede oscilar entre un 25% y un 30% sobre el coste final.

¿De dónde proviene esta diferencia tan notable? Principalmente, al ser tú el promotor, eliminas los márgenes de beneficio que aplicaría una empresa promotora tradicional. Además, si comparas con la compra en el mercado de segunda mano, te ahorras los honorarios que percibirían las agencias inmobiliarias. Sin embargo, este ahorro no es gratuito; se "paga" con tu tiempo, esfuerzo y la asunción de riesgos que en una compra estándar recaerían en otros.

Desglosando los Costes: La Regla 40-40-20

Para tener una visión clara de dónde irá tu dinero al construir tu casa, es fundamental entender la estructura de costes de la autopromoción, que difiere sustancialmente de la compra de una vivienda terminada. La norma general que suele aplicarse es la regla 40%-40%-20%:

  • 40% - Compra del Solar: A menos que ya poseas un terreno, adquirido o heredado, la adquisición de la parcela donde construirás tu casa representará la partida de gasto más importante. La ubicación, el tamaño y la calificación urbanística del suelo influyen enormemente en este coste.
  • 40% - Ejecución de la Obra: Esta cifra cubre todo lo relacionado con la construcción física de la vivienda. Incluye los costes de materiales, mano de obra, maquinaria, cimentación, estructura, cerramientos, instalaciones (electricidad, fontanería, etc.) y acabados. La calidad de los materiales y la complejidad del diseño impactarán directamente en esta partida.
  • 20% - Otros Gastos: Este porcentaje, aunque menor, agrupa una serie de costes que son absolutamente necesarios y no deben subestimarse. Aquí se incluyen los impuestos y tasas asociados a la construcción y la propiedad, los honorarios de los profesionales técnicos (arquitecto, arquitecto técnico, geólogo, etc.), los gastos derivados de la búsqueda y formalización de la financiación (hipoteca), seguros y otros posibles imprevistos.

Comprender esta distribución te permitirá planificar tu presupuesto de forma más realista y evitar sorpresas desagradables.

Definiendo tu Proyecto: La Base de Todo

Antes de lanzarte a buscar terreno o financiación, el primer paso crucial es definir exactamente qué tipo de vivienda quieres construir y, lo que es igual de importante, cuánto estás dispuesto a invertir en ella. Las características de tu futura casa (tamaño, número de plantas, diseño, calidades) determinarán en gran medida el presupuesto necesario y el tiempo de ejecución.

No es lo mismo una casa de 100 m² que una de 300 m², ni una vivienda en el campo que una en una zona urbana consolidada. Sé realista con tus posibilidades económicas y establece un presupuesto máximo. Este presupuesto servirá como guía para todas las decisiones posteriores, desde la elección del terreno hasta la selección de acabados. Tener claridad en esta etapa temprana te ahorrará tiempo y posibles frustraciones.

La Elección del Terreno: Un Paso Crítico

La búsqueda y adquisición del terreno es, como hemos visto, uno de los mayores desembolsos, pero también puede ser una fuente importante de problemas si no se elige correctamente. La diversidad de tipos de suelo y las normativas urbanísticas complican esta tarea. Para simplificar el proceso y evitar obstáculos legales o técnicos futuros, es altamente recomendable centrar la búsqueda en suelos urbanos consolidados o terrenos rústicos que cuenten con la calificación específica que permita la construcción de una vivienda residencial unifamiliar.

Adquirir un terreno con la calificación adecuada te asegura que podrás obtener las licencias necesarias para construir. Evitar terrenos con cargas, problemas de lindes o ubicados en zonas con restricciones especiales (protección ambiental, etc.) te ahorrará muchos dolores de cabeza, retrasos y costes adicionales.

Financiación para Autopromotores: La Hipoteca Específica

Aunque la autopromoción sea más económica que comprar una casa terminada, la inversión inicial y durante el proceso es considerable. Si no cuentas con el capital total ahorrado o proveniente de otras fuentes (venta de bienes, herencias), necesitarás recurrir a la financiación externa. La herramienta más común para ello es la hipoteca al autopromotor.

Este tipo de préstamo hipotecario está diseñado específicamente para financiar la construcción de una vivienda. A diferencia de una hipoteca convencional para compra, el banco no entrega el dinero de golpe, sino que lo hace de forma progresiva, mediante certificaciones de obra, a medida que avanza la construcción. Generalmente, estas hipotecas cubren hasta un 80% del valor de tasación de la obra (no del terreno, que suele requerir fondos propios), con plazos de devolución que pueden ir de 10 a 30 años. Es fundamental comparar ofertas de diferentes entidades financieras y entender bien las condiciones de desembolso y amortización.

El Proyecto de Ejecución y la Dirección de Obra

Una vez que tienes el terreno y has definido tu presupuesto y necesidades, el siguiente paso ineludible es encargar el proyecto de ejecución de tu vivienda. Este documento técnico, elaborado por un arquitecto, detalla de forma minuciosa cómo se construirá la casa, incluyendo planos, cálculos estructurales, especificaciones de materiales, instalaciones, etc. Es la "biblia" de tu construcción.

Es aconsejable solicitar varios presupuestos a diferentes estudios de arquitectura antes de decidirte. Compara no solo el coste, sino también la experiencia del arquitecto y la sintonía que tengas con él, ya que será tu principal aliado durante todo el proceso. Una vez elegido, se firmará un contrato que debe ser lo más detallado posible, especificando las responsabilidades, honorarios, formas de pago y la posibilidad de controlar partidas de gasto de forma independiente si así lo deseas. El arquitecto, junto con el arquitecto técnico (aparejador), serán los responsables de la dirección de obra, supervisando que la construcción se ajuste al proyecto y a la normativa vigente.

El Laberinto de Licencias y Permisos

Quizás uno de los aspectos más complejos y tediosos de la autopromoción sea la gestión de la extensa documentación y los permisos necesarios. Estos trámites se dividen en tres fases principales:

Requisitos Previos a la Construcción

  • Permiso Urbanístico: Solicitud ante el ayuntamiento para verificar que tu proyecto se ajusta al planeamiento urbanístico municipal y a la normativa aplicable en la zona donde se ubica el terreno.
  • Visado Colegial: El proyecto de ejecución, una vez finalizado, debe ser visado por el Colegio Oficial de Arquitectos correspondiente a tu comunidad autónoma. Este visado certifica la corrección formal y la identidad y habilitación profesional del arquitecto.
  • Estudio Geotécnico: Un informe fundamental que analiza las características del suelo del terreno (resistencia, composición, presencia de agua, etc.). Es realizado por un geólogo y sus conclusiones son vitales para el cálculo de la cimentación de la vivienda.
  • Licencia de Obras: El permiso más importante antes de iniciar físicamente la construcción. Se solicita en el ayuntamiento, aportando el proyecto visado, el estudio geotécnico y otros documentos. Su concesión implica el pago de tasas e impuestos municipales.

Requisitos Durante la Construcción

  • Acta de Replanteo: Documento que formaliza el inicio de la obra. En él se comprueba que el proyecto se traslada correctamente al terreno. Debe ser firmado por el autopromotor, la dirección facultativa (arquitecto y arquitecto técnico) y el constructor.

Requisitos Posteriores a la Construcción

  • Certificado Final de Obra (CFO): Una vez terminada la construcción, el arquitecto director de obra y el arquitecto técnico director de ejecución firman este certificado. Acredita que la obra se ha ejecutado conforme al proyecto y a la normativa. Debe ser visado por sus respectivos colegios profesionales.
  • Acta de Recepción de la Obra: Documento que formaliza la entrega de la vivienda por parte del constructor al autopromotor. Es el momento de revisar posibles defectos o remates pendientes y establecer plazos para su subsanación.
  • Licencia de Primera Ocupación (o Cédula de Habitabilidad): Se solicita en el ayuntamiento una vez obtenido el CFO. Certifica que la vivienda cumple las condiciones de habitabilidad y que se ajusta a la licencia de obras concedida. Es indispensable para contratar los suministros básicos y para inscribir la vivienda.
  • Inscripción Registral: Con la Licencia de Primera Ocupación y el CFO, debes acudir al Registro de la Propiedad para inscribir la escritura de declaración de obra nueva. Este documento público detalla la finalización de la construcción y las características definitivas de la vivienda.

Cada uno de estos trámites tiene sus propios plazos y requisitos, y los tiempos pueden variar considerablemente entre municipios. La paciencia es tu mejor aliada en esta fase.

El Alta de Suministros: El Último Paso

Una vez que tu casa está legalmente reconocida e inscrita, el último paso antes de poder habitarla es dar de alta los suministros básicos: electricidad, agua, gas, etc. Para ello, necesitarás presentar ante las compañías suministradoras el certificado de primera ocupación (o documento equivalente según la comunidad autónoma).

Además de este certificado, algunas compañías pueden requerir documentación técnica específica. Por ejemplo, para el suministro eléctrico, es indispensable contar con el boletín eléctrico (también llamado Certificado de Instalación Eléctrica o CIE), un documento firmado por un instalador autorizado que certifica que la instalación cumple con la normativa vigente. Asegúrate de que tus técnicos y constructores te proporcionen toda esta documentación al finalizar la obra.

Tabla Resumen de Costes (Estimación General)

Partida de Gasto% del Coste Total (Aprox.)Conceptos Incluidos
Compra del Solar40%Precio del terreno, impuestos (ITP/IVA), gastos de notaría y registro.
Ejecución de la Obra40%Materiales, mano de obra, cimentación, estructura, cerramientos, instalaciones, acabados.
Otros Gastos20%Impuestos y tasas (ICIO, licencias), honorarios técnicos (arquitecto, aparejador, geólogo), gastos de financiación (tasación, apertura hipoteca), seguros, suministros temporales, estudios (topográfico, geotécnico), gestión de residuos.

Nota: Estos porcentajes son una estimación general y pueden variar significativamente según el proyecto, la ubicación y las calidades elegidas.

Preguntas Frecuentes sobre Autopromoción

¿Cuánto tiempo se tarda en construir una casa propia?

El proceso completo, desde la compra del terreno hasta la obtención de la licencia de primera ocupación, suele llevar al menos un año y medio, aunque es habitual que se extienda más, dependiendo de la complejidad del proyecto, los trámites administrativos y posibles imprevistos en la obra.

¿Puedo ahorrar más si hago parte de la obra yo mismo?

En teoría sí, pero no es recomendable para trabajos que requieran cualificación técnica o certificación (instalaciones, estructura, etc.). Las tareas de acabado o decoración podrían ser asumidas, pero siempre bajo la supervisión de la dirección facultativa para no comprometer la calidad o la seguridad, y teniendo en cuenta que tu tiempo también tiene un coste.

¿Qué seguros necesito al construir mi casa?

Como autopromotor, eres responsable de la obra. Necesitarás un seguro Decenal de Daños (obligatorio por ley para la mayoría de las viviendas nuevas, cubre vicios o defectos que afecten a la seguridad estructural durante 10 años) y, generalmente, un seguro a todo riesgo de la construcción que cubra posibles accidentes o daños durante la ejecución.

¿Qué pasa si la obra se retrasa o surgen imprevistos?

Los retrasos y los imprevistos son comunes. Es fundamental contar con un margen económico adicional (un colchón) para cubrir posibles sobrecostes no previstos inicialmente. Una buena planificación, un contrato detallado con el constructor y una comunicación fluida con la dirección de obra ayudan a minimizar estos riesgos.

Conclusión

Construir tu propia casa es un proyecto ambicioso que requiere una inversión considerable no solo de dinero, sino también de tiempo y energía. Implica asumir responsabilidades propias de un promotor, navegar por un complejo entramado de normativas y gestionar múltiples profesionales y trámites. Sin embargo, la recompensa de vivir en una casa diseñada y construida específicamente para ti, con el potencial ahorro económico que conlleva, hace que para muchos este camino valga la pena. Si estás dispuesto a enfrentar los desafíos con información, planificación y paciencia, la autopromoción puede ser el camino para hacer realidad la casa de tus sueños.

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